Cuando hablamos de decorar una casa, ¿Qué es lo que se nos viene a la cabeza? Jarrones, cuadros, plantas, etc. No obstante, no viene mal recordar que saber elegir la vajilla adecuada es clave para completar tu decoración al 100%. La vajilla no está ahí sólo para poner tu comida, es un conjunto de piezas que influye, y no poco, en la estética de tu mesa, pero también de tu casa. Hoy, te proporcionamos una guía completa para ayudarte a que tomes la mejor decisión a la hora de elegir una vajilla. Tendremos en cuenta aspectos como el material, diseño, y resistencia. ¡Empecemos!
Errores al elegir vajilla
Lo primero es saber qué errores hay que evitar cuando tocar elegir una vajilla, y es que algunos de estos son bastante comunes. Los errores más comunes al elegir vajilla son:
- No seguir tus propios gustos.
- Elegir un material que no es resistente.
- Vasos que no combinan con la vajilla.
- Comprar vajilla de plástico o plata
1. No seguir tus propios gustos
Si, puede parecer una tontería, pero a veces, es mejor no seguir la moda ciegamente. No siempre hay que seguir recomendaciones de fuera sin tomar en cuenta qué es lo que te gusta a ti y qué estilo de vida llevas. Recuerda que la vajilla será una pieza que utilizarás a diario, más otra para ocasiones especiales, por lo que te tiene que gustar de verdad. Por eso, si eliges una vajilla basándote solo en tendencias, acabará siendo contraproducente. Lo ideal sería elegir una vajilla con un diseño que te guste y que a su vez, se ajuste a la decoración de tu casa.
2. Elegir un material que no es resistente
Otro error que vemos a diario es elegir una vajilla fabricada en un material que no es lo suficientemente resistente para tu uso diario. Aunque algunas vajillas pueden ser muy atractivas por su diseño o color, si están hechas de materiales frágiles como vidrio fino o porcelana de baja calidad, pueden romperse fácilmente si lo usas continuamente. El punto es: investiga bien antes de comprar.
3. Vasos que no combinan con la vajilla
Que vaya en consonancia es clave para que consigas una decoración impecable, así que elige bien los vasos para que combinen bien, así, no desentonarán visualmente. Si optas por una vajilla minimalista y moderna, los vasos también deberían seguir esa línea estética, y así con el resto de estilos.
4. Comprar vajilla de plástico o plata
Elegir una vajilla de plástico suele tentar bastante, principalmente, porque es práctico y barato, especialmente, para alguna comida informal, fiestas infantiles, comidas en exteriores… lo cierto es que no es lo más adecuado. Por ejemplo, si alguno de estos plásticos entra en contacto con calor, puede liberar un disruptor endocrino, lo cual puede alterar bastante nuestras hormonas.
Por otro lado, si usas una vajilla de plata, puede cambiar bastante el sabor de tu comida y, para evitar que se ensucie aún más, podemos limpiarlo con algún producto que también acabe siendo perjudicial para nosotros.
¿Por qué es importante la vajilla en decoración?
La vajilla no solo cumple una función práctica en el día a día, también juega un papel en la decoración de la mesa y el ambiente que queremos crear. Ya sea para una cena formal o una comida diaria, la elección de una vajilla adecuada puede transformar por completo la experiencia cuando toca comer con los invitados.
Al igual que los muebles y otros accesorios, la vajilla es otra forma de expresar tu propio estilo. No importa si optas por un diseño minimalista, clásico, o rústico, todo depende de lo que buscas y de qué atmósfera quieres crear en tu casa.
Aunque no lo creas, la elección de la vajilla puede influir en la percepción que tienes de los alimentos. Por ejemplo, estudios han demostrado que los colores y el diseño de los platos pueden afectar la percepción del sabor y la cantidad de comida. Los platos blancos, por ejemplo, suelen hacer que los alimentos se vean más apetecibles, y hasta sofisticados.
Tipos de vajillas
Si no sabes cómo elegir una vajilla, atento, porque el material es muy importante según el uso que le quieres dar. Hay bastantes tipos de vajilla, pero destacan:
- Porcelana.
- Cerámica.
- Gres.
Porcelana
Este tipo de vajilla se usa más para las ocasiones especiales, ya que es bastante elegante, pero también delicada. Es ideal para estas ocasiones porque es muy translúcida, aunque hay que manejarla con cuidado por su fragilidad. La única desventaja, a parte de esto, es que a veces el precio se va de mano.
Cerámica
No es tan elegante, pero si es muy resistente, bastante más. Por eso mismo, es el mejor material para una vajilla que vayas a usar a diario. Decidirse por una no suele ser un problema, porque vienen en todos los colores, tamaños y diseños. Eso si, si no están bien esmaltadas, pueden absorber manchas y hasta líquidos.
Gres
Al igual que las de cerámica, es mejor para el día a día, o si tienes una comida más informal, y también vienen en todos los esmaltes y texturas que tú quieras. Lo que más destaca con esta vajilla es que es más fácil de limpiar.
¿Cuántas piezas de vajilla necesito?
Esto ya depende de cada uno y de la situación en la que te encuentres. No es lo mismo que vivas tú solo en casa, que seas una familia numerosa, que si comes siempre en el trabajo. También depende de la cantidad de invitados que puedas llegar a recibir a lo largo de la semana. Por regla general, un juego de vajilla al completo debería bastar para el día a día.
Si sueles ser al que de normal le toca organizar las comidas familiares o entre amigos, lo recomendable suele ser contar con un servicio de entre 8 y 12 personas. Aquí puedes utilizar alguna vajilla más completa, metiendo alguna pieza como:
- Cestas para pan.
- Fuentes para servir.
- Boles para ensaladas o sopas.
- Copas o vasos a juego.
¿Qué color de vajilla elijo?
Depende, si la pregunta es qué color de vajilla es más elegante, la opción clásica suele ser el blanco, o si no, una vajilla con patrones o diseños. Puedes elegir patrones sutiles en un tono metálico, como el dorado.
Para el día a día, lo normal es una vajilla en tonos neutros como el gris claro, beige, un color marfil, o un verde oscuro. Si prefieres algo más atrevido, una vajilla en tonos oscuros como el negro, azul marino o gris antracita puede crear una mesa dramática y moderna.