Es igual de importante saber decorar tu casa, que saber mantenerlo todo bien organizado. Por eso mismo, este mueble es tan especial, ya que cumple ambas funciones. Existen múltiples tipos de zapateros, cada uno con sus características únicas:
- Zapatero con espejo.
- Tipo baúl para sentarse.
- Zapatero para un recibidor vs para habitación.
- Zapatero giratorio.
- Con estantes inclinados.
- Estrechos.
- Zapateros de puertas correderas.
- Zapatero abierto.
Veamos un poco todos y descubre cuál es el más adecuado para ti.
Tipos de zapateros
A día de hoy, tenemos una gran cantidad de zapateros en el mercado, que van desde los más funcionales y prácticos hasta los que destacan en diseño. Pasemos a ver en detalle los tipos de zapateros más populares.
Zapatero con espejo
Por lo general, para aprovechar el espejo, suele ser un mueble en altura. Este tipo de zapatero suele ser bastante grande, y tiene una puerta típica de armario, o abatible, según el diseño. Es perfecto, no sólo para un recibidor, también para un vestidor o dormitorio. Además, es perfecto si tienes poco espacio, ya que lo que ocupa es principalmente en altura. Suele tener un diseño limpio y contemporáneo, ideal para hogares minimalistas o modernos.
Zapatero para sentarse
Lo mejor si eres de los que se calza en la entrada de tu casa. Es un dos por uno por así decir, ya que también es un banco muy práctico para ponerte o quitarte los zapatos y, por su tamaño, también puedes usarlo tanto en recibidor como a los pies de tu cama.
Generalmente cuenta con compartimentos abiertos o cerrados donde puedes organizar varios pares de zapatos. Como casi cualquier zapatero, suele tener muchas variantes para todos los estilos, pero, en el que más se suelen ver, es en los rústicos.
Zapatero para recibidor o habitación
Por lo general, no suelen tener la misma funcionalidad, ya que, uno está más enfocado a la comodidad, y otro, al diseño. Si te preguntas dónde se debe poner el zapatero, el mejor sitio es el recibidor. El motivo es que así, conforme llegas a casa, te puedes descalzar, evitando que toda la suciedad de fuera entre a casa. Además, al haber de todos los tamaños, no suele haber problema a la hora de poder colocar uno en la entrada, o cerca de ella.
Zapatero giratorio
Es una opción poco común, pero bastante original. Estos zapateros están diseñados para girar sobre su propio eje, lo que facilita el acceso a todos los pares de zapatos sin necesidad de moverte. Este tipo de zapatero puede almacenar más zapatos que un zapatero tradicional de la misma dimensión, y tampoco tiene puerta.
Solo te recomendamos este tipo de zapatero si tienes espacio de sobra.
Zapatero con estante inclinado
Estos tipos de zapateros si suelen tener la puerta cerrada y, al contar con estantes inclinados, tienen un fondo estrecho, ya que no les hace falta más espacio. Lo bueno que tienen es que, por su diseño, es más fácil retirar y colocar zapatos, haciéndolo muy práctico para el día a día. Su estructura cerrada e inclinada lo hace bastante ligero, permitiendo que el zapatero ocupe bastante menos que otros.
Zapatero estrecho
Lo mejor si tienes poco espacio en tu recibidor o pasillo. A pesar de su tamaño, suele tener capacidad de sobra para bastantes pares de zapatos, ya que tienen varias baldas.
Si tienes poco espacio pero muchos zapatos, esta opción es la más práctica.
Zapatero de puertas correderas
Este zapatero es una de tus mejores opciones si quieres mantener los zapatos fuera de la vista y, al mismo tiempo, ahorrar espacio, ya que las puertas correderas permiten acceder a los zapatos sin necesidad de abrir hacia afuera.
A pesar de su diseño compacto, puede almacenar muchos pares de zapatos, dependiendo del tamaño y la configuración. Es de lo mejor que vas a encontrar que combine funcionalidad y estética tan bien.
Zapatero abierto
Dentro de los tipos de zapateros, este es el más común y sencillo. Como su nombre lo indica, no tiene puerta ni cubiertas. Básicamente, dejas a un lado la estética para tener un mueble dedicado, en su totalidad, a la comodidad, y a que sea práctico para tu día a día. También tiene algo muy bueno, y es que, al no tener puertas, permite que los zapatos respiren, lo que te evita malos olores o acumulación de humedad.
Elegir el tipo de zapatero adecuado para tu hogar depende de varios factores: el espacio disponible, el estilo decorativo, y la cantidad de zapatos que necesitas almacenar. Desde opciones con espejo hasta zapateros giratorios, existen alternativas para todos los gustos y necesidades. Si tienes un hogar moderno y con espacio reducido, un zapatero con espejo o un zapatero estrecho puede ser ideal. Para aquellos que valoran la comodidad, un zapatero para sentarse ofrece una solución práctica y estética. En definitiva, sea cual sea tu casa, hay un zapatero perfecto para ti.